En la lengua china «Wu» significa cinco, y «Hsing» significa movimiento. La teoría del Wu Hsing, habla de los Cinco Elementos chinos los cuales son: madera, fuego, metal, agua y tierra, los cuales son asociados respectivamente, con la influencia de los cinco planetas: Júpiter, Marte, Venus, Mercurio y Saturno, tambien trata sobre la tierra y los seres humanos, al igual que el Yin y el Yang con la Luna y el Sol. Son esencias espirituales que generan todas las sustancias materiales. Cada uno de estos elementos posee unas características especiales e influyen en el carácter de la gente según nazca bajo uno u otro signo. Si bien cada animal rige un año lunar, los cinco elementos gobiernan diez años. Cada elemento reina dos años, uno bajo el signo del Yin y otro bajo el signo del Yang. De esta forma se establece un equilibrio, que es fundamental en la concepción de la filosofía china.
Los cinco elementos están íntimamente relacionados entre sí, se transforman unos en otros, se controlan o son controlados, creando una evolución constante, como por ejemplo la madera produce fuego, el fuego la tierra, ésta el metal, el metal produce agua al fundirse, y ésta produce madera. Pero, a su vez, el metal destruye la madera, la madera absorbe el agua, el agua destruye el fugo y éste funde el metal. Al igual que el Yin y el Yang, los cinco elementos generan una dependencia y control mutuo. No existe ningún elemento que sea mas fuerte, ni tampoco existe uno que sea más débil. Un elemento es fuerte en la medida que otro puede ser controlado, pero es débil porque a su vez puede ser controlado.